Cada Instituto religioso tiene en sus raíces experiencias fundantes de la admiración, la difusión, la devoción y las constantes súplicas del Venerable al Santo Patriarca en favor de sus Obras misioneras. Como subsidios tendremos a la mano: la Carta Apostólica Patris Corde (Con corazón de padre), los apartes de Mi Diario, los Manuales de Piedad y algunos documentos especiales en nuestros archivos institucionales...
En el Nº 5 de la Carta Apostólica el Papa llama a San José, padre de la valentía creativa:
Incluso nuestra vida parece a veces que está en manos de fuerzas superiores, pero el Evangelio nos dice que Dios siempre logra salvar lo que es importante, con la condición de que tengamos la misma valentía creativa del carpintero de Nazaret, que sabía transformar un problema en una oportunidad, anteponiendo siempre la confianza en la Providencia […] El Evangelio no da ninguna información sobre el tiempo en que María, José y el Niño permanecieron en Egipto. Sin embargo, lo que es cierto es que habrán tenido necesidad de comer, de encontrar una casa, un trabajo. […] La Sagrada Familia tuvo que afrontar problemas concretos como todas las demás familias, como muchos de nuestros hermanos y hermanas migrantes que incluso hoy arriesgan sus vidas forzados por las adversidades y el hambre. A este respecto, creo que san José sea realmente un santo patrono especial para todos aquellos que tienen que dejar su tierra a causa de la guerra, el odio, la persecución y la miseria.
Invocar a San José para conseguir los recursos materiales que le son menester para atender las necesidades de su Obras. Leamos juntos algunos párrafos de Mi Diario en donde el Venerable Miguel Ángel Builes, manifiesta esta confianza absoluta, sin cesar en el trabajo para recabar los medios:
En 1948 está en un apuro para saldar una deuda, reparte a quien corresponde la intercesión para cada mes, y es evidente que no se escapa San Jose:
“Hoy a las 4 recibí una nota según la cual se me notifica que el Royal Bank of Canadá recibió endosadas las letras de octubre de este año a Marzo del 49 que firmé a Don Eusebio por $3.000 cada una. El Señor tan bueno y mi adorada Madre y Teresita mía no me dejarán quedar mal: en octubre me mandará la plata la Virgen del Rosario. / en noviembre las ánimas. Y Ella, la Madre de las Mercedes. / en diciembre la Inmaculada. ¡Qué aguinaldazo!/ en enero los Reyes Magos y la Silla de la Eterna Sabiduría./ en febrero la Candelaria./ en Marzo la bondadosa protección de San José y Ella, Madre de Dios./ para el año entrante invocaré de una vez: En abril [] / en mayo Ella, por ser el mes de las flores./ en junio el divino Corazón y el Corazón de Ella./ en julio la dulce Chinca de nuestra Patria./ en agosto desde el Cielo me socorrerá Asunta./ en septiembre la Madre de las Misericordias./ en octubre la Madrecita del Rosario etc., etc, etc. Con cuánta fe le pedí que me dé la santidad y la platica, en el mucho más abundante desfile de almas a su Santuario de las Misericordias”. (Mi Diario 31.08.1949)
Siete meses después parece presionarle de nuevo porque la necesidad continúa apremiante:
“En obsequio de San José ofrezco cada minuto de este mes. Y que me alcance el bendito santo con qué pagar los $3.000,00 de este mes del contado de marzo y $10.000,00 para Madre Amalia. Ea San José bendito: te vas a manejar muy bien. ¿Qué son $13.000,00 para ti? ¡Nada! Y para mí: un inmenso tesoro. Y que me ayudes en el orden espiritual también y ante todo”. (Mi Diario 01.03.1949)
Al Patriarca el Venerable lo honra con notas musicales y después del estímulo viene la petición:
“Prediqué a las Hermanas. Compuse los nuevos “gozos” a mi padre San José; (musiquita) mañana los estrenarán. Y que él me alcance santidad de vida para mí y para los míos y platica para mis cosas que son todas de Jesús”. (Mi Diario 16.03.1949)
Tres intenciones en una le presenta el Venerable al iniciar el mes de marzo de 1950:
“He ofrecido de antemano a San José todo el mes, primero para que el Capítulo General de los Javerianos sea dirigido y precedido por él mismo; segundo para que nos mande las platas para gastos enormes en tantos frentes; tercero para que coopere a que el Cielo me dé la señal necesaria para conocer la voluntad de Dios en lo relativo al quinto rayo de la estrella, esa estrella que el Señor empezó, continúa ahora y solidará y perfeccionará por su Providencia e infinita misericordia”. (Mi Diario 01.03.1950)
Con los mínimos detalles el Venerable describe las características del terreno y pide tanto a San José como a su bendita Esposa la valiosa intercesión:
“Al pasar por la Capilla recé el Veni Santo Spiritus, encendí un cirio a San José y le rogué a la Madrecita que por su bondad aceptara el triduo y nos diera la casa y solar y luego la plata para comprarlo. Llegado Luis Alejandro luchamos juntos por conmover al “Viejo” dueño... pero inconmovible y cerrado en 28 pesos por vara cuadrada de superficie. Valor del terreno, (700 varas cuadradas) setecientas varas cuadradas, a 28 pesos = 19.600,00. Equivalen a 20.000,00 redondos con determinados gastos. (Mi Diario 18.02.1951)
Al Venerable Fundador, San José le ayudó, le enseñó a vivir confiado en la Divina Providencia. En la vida del Fundador como en la de San José hubo momentos de oscuridad, de aprietos. Los Evangelios nos enseñan que San Los Evangelios nos enseñan que San José pasó por momentos difíciles pero supo abandonarse dócilmente en las manos del Padre Providente, aunque no entendía la situación o le podría haber costado lo que sucedía […], basta pensar en las circunstancias dramáticas de tener que escaparse como criminales perseguidos, a Egipto (Cf Mt 2,13-18), a un país lejano, y buscar allí dónde y cómo vivir, dónde trabajar… se trasladaron allí sin tener contactos ni parientes, siendo extranjeros y desconocido
Como familia MAB con nuestros laicos asociados, evangelizandos, bienhechores, etc., dirijamos a San José de modo particular una súplica, por los médicos y personal sanitario en el mundo entero, por nuestras casas de la salud, que con mucha entrega, se juegan la vida por los demás y cuidan de ellos, como San José lo hizo con el Niño y su Madre. Cuánto heroísmo, cuánta entrega, cuánta abnegación.
No es nada fácil llevar adelante su vocación y su trabajo en estos momentos de dificultades. También se han visto afectados por el COVID19 miembros de nuestra Familia MAB, familiares, evangelizandos y bienhechores. La salud es en este momento histórico un apuro de toda la humanidad.
San José, enséñanos a confiar en la Providencia, a cuidarnos y a cuidar a los hermanos, a los más vulnerables. Así sea.
En este año 2021 celebramos la GRATUIDAD de Dios por el aniversario No. 50 de la Pascua Eterna de Nuestro Venerable Obispo Misionero de Colombia Monseñor Miguel Ángel Builes Gómez, que aún, brilla como el oro en cada rinconcito de la Diócesis de Santa Rosa de Osos, en cada Parroquia, en sus párrocos y feligreses, en sus Hijos Javieres, las Misioneras de Santa Teresita, las Hijas de la Misericordia, las Teresitas Contemplativas y los Institutos nacientes de su espiritualidad: Auxiliadoras de Cristo Sacerdote, Contemplativos Javerianos Ad Gentes y en cuantos laicos le ha regalado la Providencia en los diversos lugares, países y continentes donde sus Hijos e Hijas testimonian la “VALENTIA CREATIVA”, que expresa el Papa Francisco, con respecto a San José.
Celebremos cada 29 de mes, con alguna acción significativa la gratitud y alabanza a Dios por estos cincuenta años de compañía desde las eternas moradas, pero como lo dijera él mismo “regando con Teresita pétalos de santidad sobre la tierra, sobre su amada Diócesis y sobre sus Institutos, para que el Reino de Dios se haga más visible.
Imagen de Alejandra Inés Arias
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