La experiencia de la fe viva y verdadera, Miguel Angel la constituyó en una unidad interna entre: su Amor a Cristo, su mística por el cuerpo místico, su amor a la Iglesia, y su rol misionero-evangelizador. Esto lo lleva a ver la necesidad urgente APRENDER, VIVIR Y ENSEÑAR A JESUCRISTO.

Y… POR QUÈ HABLAR DE IDENTIDAD O DE PENSAMIENTO CATEQUÈTICO DE MONSEÑOR MIGUEL ANGEL BUILES?

El Concilio Vaticano II significó un impulso renovador en la Iglesia Católica. Estos nuevos aires llegaron a la catequética, impulsando a muchos teólogos y en diversas partes del mundo a pensar el rol de la catequesis en la vida eclesial. Y Monseñor Builes no fue ajeno a la propuesta del Concilio.

Este recorrido por el pensamiento de MONSEÑOR BUILES nos invita a comprender la catequesis dentro del campo de la comunicación y la evangelización, pues nuestra fe se centra en un Dios que se revela al ser humano y quiere entablar una relación con él.

Si tuviera que definir a este hombre santo, la única forma de hacerlo sería a partir de su práctica y de su espiritualidad que trasciende los tiempos. Me atrevo a decir que su pensamiento y su obra están plenamente vigentes, por la presencia difundida que despliegan hoy sus Institutos y que han recibido, hace rato la aprobación de ser presencia viva en este mundo.

Para sus hijos e hijas son más de tantas décadas de arduo trabajo misionero, catequético, educativo, intelectual y social. Ha sido una historia de ires y venires, pero no inhabilitantes para obedecer el mandato de Cristo “Id por todo el mundo y predicad el Evangelio”. Una bandera de luchas, un estandarte que se mantiene en alto, unas comunidades al servicio de los hermanos, movidos por la fe y el amor.

Miguel Ángel Builes ha sido descrito como el MISIONERO DE COLOMBIA. El titulo se desprende de ese de afán de llevar a Jesucristo por todo el mundo, por toda Colombia, hasta los rincones más apartados del mundo entero. Monseñor Builes en su lógica evangelizadora lo llevó más tarde a entender la necesidad de Enseñar a Jesucristo, porque el pueblo necesitaba de la catequesis para superar la “ignorancia el no conocer a Jesucristo”.

En las “Visitas Pastorales” que fueron “Visitas Misión”, Miguel Ángel Builes planteó una disciplina original, un método ascéticamente rico, eficaz, sobrenatural evangelizador, el que heredamos sus hijos e hijas y también la Iglesia: “Ante todo manifestamos nuestra alegría y nuestra satisfacción por la prontitud y exquisita buena voluntad con que atendieron a nuestro fraternal llamamiento a escuchar la divina palabra, confesarse y comulgar durante esta visita, más misión que visita” (Ituango 1925).

La Catequesis, con la tarea de “enseñar a Jesucristo”, es la verdad incomparable de renovación de la vida cristiana que pide la humanidad entera, ayer-hoy y siempre. El sentido misionero de ir, siempre ir, de enseñar a Jesucristo, de cristificarse para cristificar, que planteaba Monseñor Builes, es un toque a la generosidad del que se da por entero.

Frente al reto de la “Sinodalidad” es reto, seguir fortaleciendo y experimentando en nuestros corazones el ardor por difundir eso de “ser otro Cristo” y de seguro que su amor seguirá vivo, cada vez que sepamos encarnar la fórmula que condensa la vida y la obra de Monseñor Miguel Ángel Builes a la Mayor Gloria de Dios y a María... (continuará)